En el post anterior Economía Circular y Reciclaje discutimos el reacondicionamiento, la reutilización y el reciclaje.
En resumen, el reciclaje (especialmente el reciclaje de plástico) sigue siendo una forma de ayudar al medio ambiente, aunque el reacondicionamiento y la reutilización son claramente preferibles. Hoy, profundizaremos en los detalles del reciclaje de materiales plásticos, comenzando con una distinción importante: el origen del plástico reciclado.
De hecho, existen dos fuentes principales de reciclaje:
Reciclaje preconsumo (o postindustrial)
En el reciclaje preconsumo, también conocido como reciclaje postindustrial, los desechos de la producción se reutilizan en el proceso de fabricación.
A veces se trata de material desechado por una industria con estándares de calidad superiores, que se mezcla adecuadamente y se utiliza en otras industrias. O en la misma industria, el material ya procesado se descompone para obtener nuevo plástico.
Reciclaje posconsumo
En el reciclaje posconsumo, el material, después de ser utilizado por el usuario final, se desecha.
A partir de aquí, comienza un proceso largo de recuperación y regeneración del plástico.
El reciclaje postindustrial es una forma virtuosa de reciclaje, ya que requiere un gasto mínimo de recursos. En este caso, el plástico llega al consumidor solo después de haber sido reciclado. Por el contrario, el reciclaje posconsumo es ambientalmente costoso, ya que el plástico del consumidor debe pasar por todas estas etapas para volver a ser «trabajable»:
A) Recolección: el plástico se recoge de diversas fuentes, como la separación de residuos domésticos, centros de recogida especializados y programas de reciclaje empresarial.
B) Separación y Clasificación: el plástico se separa según su tipo, como el PET (utilizado para botellas de plástico), el PVC o el polipropileno. Este paso es crucial porque los diferentes tipos de plástico requieren procesos de reciclaje diferentes.
C) Limpieza y Preparación: el plástico se limpia para eliminar contaminantes como etiquetas, pegamento o residuos de alimentos. Luego, se tritura en pequeños trozos, listos para ser regenerados. A veces, es necesario utilizar aditivos para eliminar posibles contaminaciones bacterianas.
D) Fusión y Regeneración: el plástico triturado se derrite y se transforma en gránulos o pellets que se pueden utilizar para producir una amplia gama de artículos, como botellas, ropa, muebles y más.
Es evidente que el reciclaje posconsumo requiere un uso significativo de recursos, lo que impacta tanto en el medio ambiente, con la emisión de CO2, como en el costo del material reciclado, que actualmente es más alto que el del material virgen. Sin embargo, precisamente este desafío del reciclaje posconsumo es algo que debemos abordar, tanto como productores como consumidores, para preservar nuestro entorno. De hecho, las alternativas al reciclaje son la disposición en vertederos o la incineración para la recuperación de energía.
SbS ha estado utilizando plásticos reciclables de origen principalmente posindustrial durante años. Además, en nuestras nuevas líneas de productos, estamos introduciendo gradualmente una versión especial con plásticos reciclados de origen posconsumo en nuestra oferta. Esto es un signo tangible de nuestro compromiso con el respeto al medio ambiente.