Mecanismo automatico

Varios clientes nos piden aclaraciones sobre el mecanismo automático para sillas de oficina.
Entonces, veamos qué es este mecanismo y qué lo distingue de los demás. …

En nuestro artículo anterior «Mecanismos para sillas de oficina», ya habíamos hablado de este importante componente para silla de oficina, el mecanismo, considerado el «corazón» de la silla, y habíamos visto las características y tipos que ofrece el mercado.

El mecanismo automático es un mecanismo sincronizado, un sincro.
Cuando nos balanceamos en una silla de oficina equipada con un sincro, cada grado de inclinación del asiento corresponde a aproximadamente 2,5 grados de inclinación del respaldo. Es el propio mecanismo el que «sincroniza» la inclinación del asiento con la del respaldo, lo que hace que el balanceo en nuestra silla de oficina sea cómodo y relajante. Si el mecanismo no estuviera sincronizado durante el balanceo, sentiríamos una molesta fricción en nuestra espalda.

Por lo tanto, el mecanismo automático es un sincro, pero además de esto, tiene otra característica que lo diferencia de otros sincros. De hecho, el automático tiene una manivela menos que los mecanismos sincro tradicionales.

Veamos por qué.

Cuando un usuario se balancea en su silla de oficina, el mecanismo sincro lo acompaña en el movimiento con una fluidez que es ajustable. Normalmente hay una manivela, llamada tensor, que permite ajustar la TENSIÓN del mecanismo, lo que hace que el movimiento sea más o menos fluido.

En función del tipo de ajuste, podemos distinguir entre:

– Mecanismos automáticos:
no tienen la perilla del tensor: el mecanismo ajustará automáticamente su respuesta según el peso del usuario. Este es claramente un mecanismo intuitivo y simple, pero no se puede modificar la respuesta del mecanismo. Estos mecanismos también se llaman «auto-pesantes» o «pesa-personas».
Los ME31 y ME32 (sin y con translador integrado respectivamente) pertenecen a esta categoría.

– Mecanismos con tensor central:
el tensor está en posición central y normalmente es la perilla más grande del mecanismo.
Al girar esta perilla se puede hacer que la respuesta del mecanismo sea más o menos intensa. El usuario puede ajustar la suavidad del balanceo.
El ME05/ME06 o el 359/Z pertenecen a esta categoría.

– Mecanismos con tensor lateral:
el tensor está en posición lateral y la perilla correspondiente es accesible en un lado del mecanismo, por lo que el usuario puede accionarla más fácilmente.
De hecho, en los mecanismos con tensor central, la operación de ajuste no es muy sencilla, ya que el usuario tiene que inclinarse hacia adelante adoptando una posición bastante incómoda.

Con el tensor lateral, el usuario puede ajustar la tensión cómodamente sentado.

En esta categoría podemos hacer una distinción adicional.

Algunos mecanismos con tensor lateral tienen una ajuste muy fino y al girar la perilla se tiene la impresión de que el comportamiento del mecanismo no cambia mucho. En los mecanismos más avanzados, en cambio, el tensor lateral puede ofrecer pocos «clics» (4 o 5 por lo general) con los cuales se ajusta la tensión de muy ligera a muy rígida. Este comportamiento se define de varias maneras, como por ejemplo «quick adjustment» o «quick shift», y de hecho es una prerrogativa de los mecanismos más modernos y de alta gama, como el ME51 y el ME52 (sin y con desplazador de asiento integrado respectivamente).

Volviendo al tema principal, concluimos observando que los mecanismos automáticos ofrecen una perilla menos y por lo tanto son más simples e intuitivos de usar, pero a su vez no permiten una regulación «finísima» de la tensión del mecanismo. De hecho, ya habíamos hablado de estos mecanismos en nuestro artículo anterior: auto-pesante o automático son dos sinónimos que indican el mismo tipo de mecanismo.